Tras derrotar a Djokovic por 6-3, 2-6 y 6-1EUROPA PRESS 19-04-2009/ Cadena SER
El tenista español Rafael Nadal consiguió su quinta corona consecutiva en Montecarlo tras derrotar en la final del tercer Masters 1000 de la temporada al serbio Novak Djokovic (6-3, 2-6 y 6-1), en un partido muy igualado en el que el número uno mundial sudó para mantener su hegemonía en tierras monegascas.
El de Manacor, que venía de superar ayer otro difícil choque en las semifinales frente al escocés Andy Murray, dio muestras de flaqueza física y mental tras los esfuerzos de una temporada, que entra con la tierra en su fase más importante para el mallorquín si quiere mantener su primer puesto mundial.
A diferencia de lo que sucediera en el precedente anterior entre ambos jugadores en la primera ronda de la Copa Davis disputada en Benidorm, en la que el manacorí cerró con comodidad la eliminatoria tras ganar 6-4, 6-4 y 6-1, el número uno serbio planteó más dificultades.
El partido comenzó como más le gusta al balear, con un ''break'' a favor al resto, aunque fue rápidamente respondido por Djokovic, llevando la igualada al tanteador. Con el set avanzado en 3-3, el español mantuvo su juego de fondo al revés de su rival, y pudo finiquitar por la vía rápida esta manga tras firmar dos nuevas roturas del servicio del serbio.
En la segunda manga y al igual que sucediera en las semifinales, Nadal se relajó y permitió al de Belgrado entrar en el partido, que con una renovada confianza combatió los ''bombardeos'' del español, que no se mostró tan intratable como en otras ocasiones y cedió el segundo parcial por 6-2.
El punto de inflexión del partido se dio en el primer juego del tercer set, marcado por los largos intercambios y las constantes ventajas del serbio que, pese a disponer de tres bolas de rotura, finalmente cedió ante el manacorí después de batallar más de trece minutos en la pista.
Con la recuperación del balear, el resto de la final se puso de cara para Nadal, que acabó dilapidando las esperanzas de Djokovic al tomar nuevamente la dirección del partido y sumó su vigésimo primera victoria consecutiva en tierra desde su derrota el pasado año en el Masters 1000 de Roma frente a Juan Carlos Ferrero.
Con esta victoria, Nadal sumó su trigésimo cuarto título como profesional, tercero en lo que va de temporada tras el Open de Australia y el Masters 1000 de Indian Wells, y su decimocuarto Masters 1000, igualando en esta última cifra al helvético Roger Federer y quedándose a tan sólo tres galardones de André Agassi, que lidera este apartado con 17 laureles.
De este modo, una vez solventado el primer compromiso en arcilla, Nadal viajará de inmediato a Barcelona con el objetivo de seguir su programa que le lleve a disputar, además del Conde de Godó, los Masters 1000 de Roma y Madrid y el segundo Grand Slam de la temporada, Roland Garros.
Micrófono en mano, con un cheque de 434.000 euros y mil puntos en la clasificación, el español Rafael Nadal expresó hoy que ganar de nuevo en Montecarlo era un auténtico sueño.
"Me encanta jugar aquí", dijo Nadal flanqueado por el príncipe Alberto II en la entrega de trofeos, con la misma calma y serenidad con la que destrozó al serbio Novak Djokovic en la final del Principado. "Y ganar cinco veces aquí es un sueño para mí", expresó.
El español agradeció a todos los aficionados el apoyo recibido, y felicitó a Djokovic por su trabajo. Al serbio, resignado, le salió del alma una frase para la historia: "Rafa eres increíble".
"Espero el próximo año hablar en francés, no lo he progresado suficiente", bromeó Djokovic, quien se tuvo que conformar con un cheque por 203.000 euros y 600 puntos, y asumir una realidad: por el momento no es capaz de ganar al español en tierra batida.
A diferencia de lo que sucediera en el precedente anterior entre ambos jugadores en la primera ronda de la Copa Davis disputada en Benidorm, en la que el manacorí cerró con comodidad la eliminatoria tras ganar 6-4, 6-4 y 6-1, el número uno serbio planteó más dificultades.
El partido comenzó como más le gusta al balear, con un ''break'' a favor al resto, aunque fue rápidamente respondido por Djokovic, llevando la igualada al tanteador. Con el set avanzado en 3-3, el español mantuvo su juego de fondo al revés de su rival, y pudo finiquitar por la vía rápida esta manga tras firmar dos nuevas roturas del servicio del serbio.
En la segunda manga y al igual que sucediera en las semifinales, Nadal se relajó y permitió al de Belgrado entrar en el partido, que con una renovada confianza combatió los ''bombardeos'' del español, que no se mostró tan intratable como en otras ocasiones y cedió el segundo parcial por 6-2.
El punto de inflexión del partido se dio en el primer juego del tercer set, marcado por los largos intercambios y las constantes ventajas del serbio que, pese a disponer de tres bolas de rotura, finalmente cedió ante el manacorí después de batallar más de trece minutos en la pista.
Con la recuperación del balear, el resto de la final se puso de cara para Nadal, que acabó dilapidando las esperanzas de Djokovic al tomar nuevamente la dirección del partido y sumó su vigésimo primera victoria consecutiva en tierra desde su derrota el pasado año en el Masters 1000 de Roma frente a Juan Carlos Ferrero.
Con esta victoria, Nadal sumó su trigésimo cuarto título como profesional, tercero en lo que va de temporada tras el Open de Australia y el Masters 1000 de Indian Wells, y su decimocuarto Masters 1000, igualando en esta última cifra al helvético Roger Federer y quedándose a tan sólo tres galardones de André Agassi, que lidera este apartado con 17 laureles.
De este modo, una vez solventado el primer compromiso en arcilla, Nadal viajará de inmediato a Barcelona con el objetivo de seguir su programa que le lleve a disputar, además del Conde de Godó, los Masters 1000 de Roma y Madrid y el segundo Grand Slam de la temporada, Roland Garros.
Micrófono en mano, con un cheque de 434.000 euros y mil puntos en la clasificación, el español Rafael Nadal expresó hoy que ganar de nuevo en Montecarlo era un auténtico sueño.
"Me encanta jugar aquí", dijo Nadal flanqueado por el príncipe Alberto II en la entrega de trofeos, con la misma calma y serenidad con la que destrozó al serbio Novak Djokovic en la final del Principado. "Y ganar cinco veces aquí es un sueño para mí", expresó.
El español agradeció a todos los aficionados el apoyo recibido, y felicitó a Djokovic por su trabajo. Al serbio, resignado, le salió del alma una frase para la historia: "Rafa eres increíble".
"Espero el próximo año hablar en francés, no lo he progresado suficiente", bromeó Djokovic, quien se tuvo que conformar con un cheque por 203.000 euros y 600 puntos, y asumir una realidad: por el momento no es capaz de ganar al español en tierra batida.
.jpg)
No hay comentarios:
Publicar un comentario